Actualmente, el yacimiento muestra estructuras pertenecientes a la pars rustica y una parte de la pars urbana, conformada por un balneum y diversas estancias del edificio residencial. Es aquí donde se sitúa la Sala Triabsidada interpretada como triclinium (comedor), que cuenta con un excepcional mosaico de 231,62 m² en el que aparecen representadas unas 150 figuras - algunas mayores que el tamaño natural -, que protagonizan varias escenas mitológicas, géneros literarios y teatrales y diversos ludi.
El mosaico destaca tanto por su tamaño como por su técnica, con pocos paralelos en el Imperio Romano por lo que se refiere a la iconografía. A todo esto se suma el excelente estado de conservación, que lo convierte en un atractivo turístico de la zona; si bien, problemas burocráticos mantienen a día de hoy la villa completamente cerrada al público.